Empanadillas de cecina, tomate y queso de cabra al horno

Las empanadillas son un clásico de la cocina. Lo mismo nos pueden servir para aprovechar los restos de otras comidas que tengamos atravesados por la nevera, que nos sirven para mostrar nuestra parte más creativa a la hora de preparar el relleno, pensando en combinaciones de ingredientes que puedan resultar deliciosas y que a la vez sorprendan a los paladares de nuestros comensales.

 

Podemos elaborar mil y un rellenos: utilizando una mezcla de carne picada con verduras o atún son un sofrito de tomate o combinar diferentes tipos de verduras pochadas o con queso que, al derretirse con el calor, hará que las empanadillas queden de escándalo o convertirlas en un deliciosos postre rellenándolas con frutas variadas, mermeladas, crema pastelera,…

 

Rellena generosamente las empanadillas con la combinación elegida y ciérralas muy bien, apretando los bordes con un tenedor, para que no se salga el relleno.

 

Puedes freírlas o prepararlas al horno con lo que resultarán más ligeras sin perder su encanto.

 

Ingredientes

1 paquete de obleas para empanadillas
150 gramos de cecina
1 rulo de queso de cabra
1 tomate mediano
1 huevo
Elaboración

Comenzamos pelando el tomate, lo partimos en láminas finas y reservamos.

Partimos también la cecina en trozos de tamaño adecuado al tamaño de las obleas que vamos a rellenar. Lo mismo haremos con el rulo de queso de cabra, procurando que los trozos no sean muy gruesos.

A continuación rellenamos las empanadillas colocando en el centro de cada oblea un trozo de tomate, un trozo de cecina y un pedazo de queso de cabra.

Dispuesto ya el relleno, doblamos cada oblea por la mitad y presionamos los bordes con un tenedor para que queden bien selladas y no se escape el relleno.

Precalentamos el horno a 180 grados.

Vamos colocando las empanadillas en una bandeja apta para hornear, forrada con papel de horno, y las pintamos con el huevo batido.

 

Introducimos al horno durante unos 15 minutos, a 180 grados.

Pasado ese tiempo, sacamos las empanadillas y las colocamos en una fuente.

Es recomendable esperar un poco antes de probarlas porque estarán bastante calientes y así evitaremos quemarnos.

 

Una ensalada de canónigos con nueces, aliñada con vinagre de Módena y aceite de oliva virgen combina muy bien con estas empanadillas.

 

¡Buen provecho!

YMI

Entradas relacionadas

Deja un comentario