A parte de ser las protagonistas de la ensaladilla rusa, las patatas cocidas pueden ser el ingrediente principal de otras muchas ensaladas.
Si las combinamos con otros productos como huevo cocido, bonito, salmón ahumado, tomates. Pechuga de pollo,…, podemos preparar unas ensaladas deliciosas.
Un par de consejos:
Hervir las patatas en abundante agua con sal, siempre con piel, así no perderán sabor y no se desharán antes de cortarlas.
Esperar a que estén bien frías para pelarlas.
Ingredientes
4 patatas medianas
3 huevos
1 lata de anchoas en aceite de oliva
½ cebolleta
Aceitunas negras
Vinagre de manzana
Sal
Un poco de perejil fresco
Elaboración
Para empezar, comenzamos cociendo las patatas poniéndolas en una olla con agua y sal, olla que colocaremos a fuego medio. Pasados unos 20 minutos, comprobamos si las patatas están cocidas pinchándolas con cuidado con un tenedor. Si el tenedor pincha la patata sin encontrar resistencia, es que ya las tenemos en su punto.
A la vez que se cuecen las patatas, podemos poner a cocer también los huevos en otra olla con agua. En cuanto el agua comience a hervir, dejamos que pasen 10 minutos antes de retirar la olla del fuego.
Antes de pelar las patatas y los huevos cocidos, dejamos que se enfríen muy bien.
Ya fríos y pelados, los partimos en trozos y los pasamos a una fuente a la que sumaremos las anchoas, la media cebolleta partida también en trozos y las aceitunas negras.
Preparamos una vinagreta con el aceite de oliva, el vinagre y la sal y regamos la ensalada con ella.
Sólo queda sentarse a disfrutar de esta fresca ensalada.
¡Buen provecho!
