El espárrago es un alimento delicioso que se puede utilizar en la elaboración de gran variedad de platos, bien como guarnición o bien formando parte del plato junto con otros ingredientes (en ensaladas, tortillas, cremas, entrantes,…)
Son diuréticos, antioxidantes, nos aportan fibra, vitaminas, son muy nutritivos,…, unas cuantas razones para consumirlos.
Gracias a que se cultivan en invernaderos, podemos encontrar espárragos a la venta durante todo el año, aunque su mejor momento es en primavera. También podemos disponer de ellos en conserva.
Existen dos variedades principales:
espárrago blanco: al crecer bajo tierra no se expone a la luz, y así presenta ese color blanco.
espárrago verde: expuesto a la luz solar durante su crecimiento, desarrolla clorofila y de ahí su color verde. Son más pequeños y finos que los blancos.
Hay que diferenciar entre espárragos verdes y espárragos trigueros, que también son verdes pero crecen de forma silvestre y suelen ser más finos que los verdes.
Y, como los espárragos combinan con todo, vamos a preparar un hojaldre con espárragos, queso y jamón que se puede convertir en una estupenda cena, por ejemplo.
Ingredientes
1 lámina de masa de hojaldre
1 bote de espárragos verdes
150 gramos de queso emmental
120 gramos de queso rallado
2 lonchas de jamón york (de un dedo de grosor aproximadamente)
8-10 aceitunas negras
Elaboración
Partimos las lonchas de jamón york en taquitos pequeños. También partimos el queso emmental en lonchas no muy gruesas.
Precalentamos el horno a 200 grados.
En la bandeja del horno colocamos papel de horno y la lámina de hojaldre. Con un cuchillo hacemos una marca todo alrededor de la lámina, dejando aproximadamente 1 cm. entre el borde de la lámina y la marca. Pinchamos con un tenedor el resto de la masa para que no abombe al cocer.
A continuación repartimos las lonchas de queso cubriendo la superficie de la masa, por encima de las lonchas de queso repartimos los taquitos de jamón york.
Ahora le toca el turno a los espárragos verdes.
Ya colocados, ponemos las aceitunas negras y espolvoreamos con el queso rallado.
Introducimos la bandeja en el horno y dejamos hornear unos 20 minutos, hasta que veamos que se dora el borde del hojaldre. El tiempo es orientativo, ya sabes, depende de cada horno.
Sacamos y dejamos templar unos minutos antes de “hincarle el diente”.
¡Buen provecho!
YMI