Ingredientes
- Chocolate amargo: 200 g
- Mantequilla: 150 g
- Azúcar: 200 g
- Huevos: 3
- Harina de trigo: 100 g
- Cacao en polvo: 2 cucharadas
- Extracto de vainilla: 1 cucharadita
- Sal: una pizca
- Nueces picadas (opcional): 100 g
Instrucciones
- Precalienta el horno: A 180 °C (350 °F) y engrasa ligeramente un molde cuadrado de 20 cm x 20 cm.
- Derrite el chocolate y la mantequilla: En un bol resistente al calor, derrite el chocolate y la mantequilla a baño maría o en intervalos cortos en el microondas. Mezcla bien hasta obtener una mezcla suave y brillante. Deja enfriar un poco.
- Añade el azúcar y los huevos: Incorpora el azúcar a la mezcla de chocolate y mantequilla. Agrega los huevos uno a uno, batiendo bien después de cada adición. Añade también el extracto de vainilla.
- Añade los ingredientes secos: Tamiza la harina, el cacao y la sal. Agrégalo a la mezcla de chocolate y mezcla suavemente con una espátula hasta que esté todo bien integrado. Si estás usando nueces, agrégalas ahora.
- Hornea: Vierte la mezcla en el molde preparado y extiéndela de manera uniforme. Hornea durante 20-25 minutos o hasta que al insertar un palillo, salga con algunas migajas húmedas (no completamente limpio, eso significaría que los brownies están demasiado cocidos).
- Deja enfriar: Una vez fuera del horno, deja enfriar los brownies en el molde durante unos 10-15 minutos antes de cortarlos en cuadrados.
¡Disfruta!
Estos brownies quedan con un exterior ligeramente crujiente y un interior denso y suave, perfectos para los amantes del chocolate. Puedes acompañarlos con helado de vainilla para un toque extra.
