Un bizcocho siempre es una buena opción para un delicioso desayuno o una riquísima merienda.
Y si, además, ese bizcocho tiene entre uno de sus ingredientes al limón, que le dará ese toque a cítricos tan refrescante, el éxito está asegurado.
El glaseado aportará un punto de distinción.
Glasear el bizcocho resulta muy sencillo y consiste en preparar una mezcla de azúcar glas y limón (en este caso9, con una densidad que le permita recubrir la superficie del bizcocho.
Ingredientes:
250 gramos de harina
250 gramos de azúcar
250 gramos de mantequilla
4 huevos
1 sobre de levadura
El zumo de ½ limón
Ralladura de 1 limón
Una pizca de sal
Para el glaseado:
100 gramos de azúcar glas
4 cucharadas de zumo de limón
Elaboración
El primer paso será poner a precalentar el horno a 180 grados, con calor arriba y abajo.
Mientras el horno va precalentado, en una fuente batimos con varillas eléctricas los huevos, el azúcar y la pizca de sal hasta obtener una mezcla de color claro.
A continuación, incorporamos la mantequilla derretida y continuamos batiendo.
El siguiente ingrediente a añadir es el zumo de medio limón seguido de la ralladura .y batimos suavemente antes de sumarla harina y la levadura tamizadas mezclando todo ello hasta obtener una masa homogénea.
Lista la masa, preparamos el molde forrando su base con papel vegetal, vertemos la masa y lo introducimos durante 35-40 minutos al horno.
Pasado ese tiempo, comprobamos si el bizcocho está hecho pinchándolo con un palillo. Si el palillo sale limpio, el bizcocho está listo; si no fuera el caso, mantenemos en el horno hasta comprobar y ver que l palillo sale limpio.
Mientras dejamos que el bizcocho enfríe, preparamos el glaseado poniendo el azúcar glas en un cuenco y vamos añadiendo cucharada a cucharada el zumo de limón, removiendo suavemente, hasta obtener una consistencia que permita verter sobre el bizcocho dejando que fluya sobre él.
¡Buen provecho!
YMI