Las galettes son una especialidad culinaria bretona muy popular. Son una variante de las crepes pero que se preparan con harina de trigo sarraceno y se rellenan con ingredientes salados.

El trigo sarraceno, a pesar de su nombre, ni contiene trigo ni su origen es sarraceno, su zona originaria de cultivo  es Asia Central. Se trata de un pseudocereal, que recibe también el nombre de alforfón, con grano duro y con un sabor que compagina muy bien con otros ingredientes salados, Llegó a Europa a finales del siglo XIV, extendiéndose su cultivo.

No contiene gluten, por lo que resulta apto para que los celíacos puedan utilizarlo en la cocina sin problema.

 

Ingredientes

Para la galette

200 gramos de trigo sarraceno
500 ml. de agua
1 huevo
1 cucharadita de sal
Para el relleno

½ pimiento rojo
½ pimiento verde
1 calabacín mediano
1 puerro
½ cebolla
Huevos (uno por galette)
Queso emmental rallado
Pimienta negra
Aceite de oliva
Mantequilla para untar la sartén
Se propone un relleno de verduras, pero podemos realizar el relleno que más nos apetezca utilizando ingredientes al gusto (jamón serrano, jamón york, tomates, champiñones, setas, espárragos, alcachofas,  frutos secos, patés, …)

 

 

 

Elaboración

El primer paso será el de preparar la masa de las galettes ya que hay que dejar que repose unos 45 minutos más o menos y podemos aprovechar ese tiempo de reposo para ir elaborando el relleno.

Para ello, añadimos el trigo sarraceno, el agua, el huevo y la sal al vaso de la batidora y batimos hasta que quede todo bien integrado con una textura similar a la de la nata líquida, que no sea muy densa, para que las galettes resulten más finas.

 

Con la masa ya preparada, pasamos a elaborar el relleno.

Lavamos muy bien todas las verduras troceando los pimientos y la cebolla en juliana y el calabacín y el puerro en trozos no muy grandes.

A continuación, ponemos una sartén al fuego con 4-5 cucharadas de aceite.

Cuando el aceite esté caliente, echamos las verduras a pochar.

En el momento que las verduras alcancen ese punto de pochado que las hace tan apetecibles, salpìmentamos al gusto y reservamos.

Llega el momento de preparar la base de las galettes  untando la superficie de una sartén antiadherente con una cantidad de mantequilla justa, la colocamos al fuego y, cuando esté caliente, vertemos un cazo de la masa en ella procurando que cubra toda la base de forma uniforme.

Dejamos al fuego hasta que veamos que los bordes empiezan a dorarse y salen unas burbujas por el centro, momento en el que damos la vuelta  para comenzar a colocar el relleno.

Bajamos un poco la fuerza del fuego y empezamos espolvoreando la masa con el queso rallado, le sigue el huevo, procurando colocarlo en el medio. En cuanto la clara comience a cuajar, vamos poniendo las verduras pochadas alrededor del huevo y doblamos los bordes para que la galette quede con forma cuadrada.

La sacamos a un plato y lista para comenzar a comer.

 

Entre  una galette y otra es recomendable limpiar la superficie de la sartén con una servilleta de papel.

 

¡Buen provecho!

 

YMI

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